DEPILACIÓN

Sobre la forma de las cejas

La forma de las cejas tiene una gran importancia puesto que le dan un toque especial a la mirada.
Cuando las cejas son pobres o están excesivamente depiladas, el rostro está apagado. Pueden rellenarse con un lápiz de cejas.

Las cejas gruesas son las más fáciles de corregir ya que basta con eliminar los pelos superfluos.

Las cejas caidas son las que comienzan rectas, siguen horizontales y caen por los extremos, dan sensación de tristeza y se pueden corregir depilando el extremo y dibujando un final más elevado con un lápiz para cejas. Las cejas horizontales deben depilarse a partir de su mitad por la parte inferior para darle un ligero arqueamiento, el más favorecedor de todos.

Cejas rebeldes

Para arreglarse las cejas en primer lugar debemos perfilarlas depilándolas por la parte de abajo, darlas forma y posteriormente maquillarlas.

Una solución rápida y sencilla para las cejas rebeldes en las que los pelos sobresalen por encima de la línea de la ceja, es peinarlos fijando con laca (aplicando un poquito de laca en el cepillito y deslizándolo sobre el pelo).

De este modo se mantiene la forma sin que se despeine y el resultado es una ceja definida y nítida con la ventaja de que la laca pasa desapercibida y no brilla como la gomina.